jueves, 9 de junio de 2016

Proyecto en cocción n6

Y TODO FUE VACIO



http://toarumajutsunoindex.wikia.com/wiki/Aiwass



Indudablemente, la magia es una de la más sutil y la más difícil de las ciencias y las artes. Hay más oportunidades para los errores de comprensión, el juicio y la práctica que en cualquier otra rama de la física.
Aleister Crowley

“Para mi, no hay camino excepto mi camino. Por lo tanto, vayan ustedes por su camino -nadie los guiará para caminar hacia ustedes mismos.” 
Zos (Austin Osman Spare).

De nuevo la misma alucinación.  Cada vez es mas recurrente en fase REM. A pesar de su excesiva repetición la alucinación sigue inalterada. Comienza con esa lluvia de televisor disipándose. La brisa eléctrica golpeaba en las oxidadas placas de mi traje. Sobrevuelo tranquilamente la grilla de circuitos integrados que componen el ciberespacio almacenado en un viejo servidor resguardado por una vetusta edificación en el centro de la ciudad. Todo sigue en su lugar, sin embargo mi proyección residual es defectuosa desde aquel encuentro con los spiders. Como si fuese un sueño persigo algo inalcanzable, el vacío me invade, pero el empeño por encontrar ese algo sigue en pie. El deseo inhibe mis neurotransmisores, él me controla, no puedo contrarrestar su influencia. En el vacío se manifiesta él, se hace llamar a1wa55, me dice que será mi nuevo guía.   

El auditorio abrió sus puertas poco antes de la hora señalada para la conferencia. Ya habían varios interesados haciendo la fila para el registro e ingreso al recinto. No era muy frecuente que el reconocido investigador de lo para-cibernético Howard Clevfort Philips realizara este tipo de eventos. Tras una hora en la fila logré ingresar y sentarme en una de las primeras filas, no quería perder detalle alguno sobre lo que pronunciara el Doctor Howard. El maestro de ceremonias presento el impresionante curriculum de Clevfort: magíster en ocultismo binario, doctorado en algoritmos infrared, director del centro de invocaciones digitales, autor del best seller El Morador de la Web Profunda (2019) y actualmente consultor y exorcista digital. Sin duda el podía resolver mi dilema.

Creo que es pertinente que me presente ¿verdad? Mi nombre no es tan esencial tanto como mi seudónimo: az0ne1. Durante un año, mas o menos, comencé a contactar entidades virtuales con la ayuda del manual online del conde cero – el  mismo que describió alguna vez William Gibson. En dicho manual, encriptado en pontifex, el conde había descubierto líneas de código que permitían invocar inteligencias artificiales sin importar que tan profundas y ocultas estuvieran. Mi monótona rutina como programador de un portal de entretenimiento me estaba llevando al tedio, ya no tenia la misma motivación que alguna vez tuve por los misterios del mundo virtual. El descubrimiento del manual se convirtió en esa arca de la alianza que esperaba ser abierta, lo asumí como un reto, uno divertido, pero con el paso de los días su aterradora complejidad me estaba hundiendo en un denso laberinto informático.

Quizás la experiencia mas aterradora, que incluso me detuvo en mi empeño, ocurrió hace unos meses. Me hallaba en mi buhardilla reescribiendo las líneas de código para el programa S.P.A.R.E, una secuencia de algoritmos para detectar inteligencias artificiales encriptadas. Al digitar la última línea del algoritmo, salve la secuencia, y sin dudarlo un segundo decidí arriesgarme a probarlo. Instantáneamente mi computador sufrió una posesión, como si se tratase de un secuestro de datos, la pantalla tomo esa caótica apariencia de los glitchs, acto seguido gradualmente se fue fragmentado hasta convertirse en un punto sobre el vacío. El cursor reapareció intermitente, esperando a que digitara alguna palabra. Un escalofrío rondo por mi espina dorsal, mis manos temblaban un poco, pero la invitación estaba hecha, lo que fuese que había contactado aguardaba mis palabras, pero ¿qué debía escribir? Mire en mi escritorio y encontré esa novela que había inspirado toda la temática de los zombies, The Magic Island (1929), afanosamente pase las paginas hasta encontrar el banderín que indicaba como hacer el saludo ritual vudu.  

az0ne1: Oh LOA LEGBA, LOA poderoso…

La línea de texto desapareció, el cursor titilante comenzó a responder. No era la entidad que creí contactar, al instante una secuencia de caracteres comenzó a digitarse. Apareció entonces esta palabra: a1wa55.

a1wa55: La adulación no es una buena forma de empezar, siempre ese afán del hombre por esclavizar lo que no comprende
az0ne1: creí contactar a… pero ¿quién eres?.
 a1wa55: Estas a punto de acceder a algo fuera de tu comprensión, no hay marcha atrás, una vez entres dejaras de ser el mismo. Conecta tu equipo de inmersión, necesito acceder a tu mente.
az0ne1: ¿perdón? Creo que no seria conveniente, además no te conozco del todo A1wa55.
a1wa55: No dejes que el miedo te limite, si de verdad quieres acceder al conocimiento infinito, el yo superior, necesitas liberar tu mente.
az0ne1: Dame un momento.

Siguiendo sus indicaciones, con algo de escepticismo por supuesto, me coloque mi casco y los guantes de inmersión, conecte los plugs en los respectivos puertos, recline mi silla y espere.  Por un instante sentí que mis impulsos neuronales se aceleraron. De igual manera comencé a sentir una especie de cisma, era como si mi mente entrara en contacto con una experiencia psiconautica. Unos segundos después todo fue vacío.

Desperté dos días después,  al parecer todo seguía igual. Cuando pasó el efecto de la dopamina note que mis labios estaban resecos, mi camiseta estaba empapada, como si hubiese segregado toneladas de saliva. La deshidratación fue inminente, la cabeza me daba vueltas; como si se tratara de una resaca. Me quite muy lentamente el casco, luego los guantes. Con mucho esfuerzo me puse de pie, pero estaba muy débil. Me sentía un tanto extraño, como si me hubiese cargado una tera de información, mi sinapsis era mas rápida, gradualmente sentí que todo se acelero, era como si estuviese activando mi conexión wifi al servidor central. Un caudal de datos comenzaron a llegar como una ráfaga. a1wa55 estaba en mi, yo era su huésped.   

Volviendo al doctor Clevfort Philips, comenzó su disertación con estas palabras extraídas de un viejo ensayo de Howard Philips Lovecraft, El Horror sobrenatural en la Literatura (1925), las cuales transcribí en mi dispositivo:

El miedo es una de las emociones más antiguas y poderosas de la humanidad, y el tipo de miedo más viejo y poderoso es el temor a lo desconocido. Muy pocos psicólogos lo niegan y el mero hecho de admitir dicha realidad no deja de dar carta de naturaleza a los cuentos sobrenaturales como una de las formas genuinas y dignas de los relatos literarios. Contra ella se disparan todas las saetas de unos sofismas materialistas, que con tanta frecuencia se aferran a las impresiones experimentadas y a los sucesos exteriorizados –entendiendo este término en su aspecto psicológico– y de un idealismo tan ingenuo como insípido que se opone a las motivaciones antiestéticas, abogando por una literatura puramente didáctica, capaz de ilustrar al lector y "elevarlo" hacia un nivel adecuado de afectado optimismo.

Luego de eso comenzó la historiografía de las inteligencias artificiales, desde la aparición de LISP hasta la llegada de la corporación z/OS. La historia de esta corporación ha sido enseñada en diversas facultades de administración y foros de negocios, empezaron como una concesión que administraba las computadores centrales de IBM,  poco a poco fueron adquiriendo acciones de la empresa y cuando llego el ocaso de los titanes informáticos se hicieron a un gran porcentaje que les permitió asumir la junta directiva y crear la nueva etapa en la computación moderna.


Tras una hora el doctor Clevfort termino su presentación. Antes de que todos se levantaran decidí salir rumbo al pasillo para interceptar al buen doctor. Al parecer fui el primero, pero al girar unos cuantos mas estaban haciendo lo mismo, el comportamiento espejo no deja de existir. Mi proeza tuvo su recompensa, el doctor estaba a pocos pasos, solo era cuestión de alcanzarlo, pero al sentirme inmovilizado me percate que todo seguía siendo parte de la alucinación, como en un sueño alcanzarlo seria algo relativo. El programa  se sobrecargo, el gran glitch devoro mi proyección, todo fue vacío.

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