lunes, 27 de junio de 2022

LA PARADOJA DE HARVEY OSWALD: UNA RESEÑA DE 22/11/63 de Stephen King

 

James Franco como Jacob Epping. Fotograma de la adaptacion a serie emitada por HBOMax 

En algún momento de toda experiencia humana se cruza por la mente la idea de viajar en el tiempo y cambiar ese acontecimiento que pudo arruinar la vida y que al regresar todo haya cambiado para mejorar. Un ejemplo explicito será la trilogía de Volver al Futuro (Robert Zemeckis, 1986) en la que el protagonista, con la ayuda de un vehículo modificado para atravesar vórtices espacio-tiempo, llega a su pueblo natal, pero en la década de los años cincuenta y debe lograr que su futuro padre deje de ser un perdedor y se enamore de su futura madre, una misión difícil sobre todo cuando ella se enamora de su propio hijo, en fin. Stephen King se lanza aquí a un terreno poco explorado en su obra y es el de usar recursos de los viajes en el tiempo para modificar un evento que marco a millones de estadounidenses: el asesinato de John F. Kennedy.

A diferencia de otras novelas que abordan el viaje en el tiempo, King no usa un sofisticado vehículo o un vórtice creado en un complejo militar o alguna clase de ingenio cuántico fractal; se vale de un agujero de una suerte de umbral que lleva a quien lo cruce a 1958. El elegido para llevar a cabo la misión de salvar al presidente Kennedy será Jacob Epping, un profesor de secundaria que también enseña clases de redacción para adultos en la jornada nocturna. Jacob al evaluar los trabajos de cierre del curso queda fascinado con el escrito del conserje del colegio, una detallada crónica en la que relata como su padre ebrio desata un mar de sangre y termina con la vida de sus hermanos y su madre. Jacob invita al conserje a celebrar su grado a una hamburguesería propiedad de su amigo Al Templeton, tras la celebración y colocar la foto en la pared de visitantes ilustres, Jacob recibe una llamada de Al quien le quiere mostrar algo que lo dejará atónito, algo que para creerlo deberá experimentarlo. Jacob acepta y al ingresar en la alacena de la trastienda del local cae en un lugar cuyo clima, personas y ambiente parecen salidos de un almanaque vintage, Jacob viaja en el tiempo a 1958. Al regresar de esta primera rodadita al pasado, Al le explica que cuando se viaja al pasado en el presente solo pasan dos minutos, sin embargo, cualquier modificación al curso de los acontecimientos causa un reinicio que puede alterar el presente.  Se puede decir que aquí el oponente del protagonista será el pasado y como este se resiste a ser alterado, siempre habrá consecuencias por mas noble que sea la acción a realizar.

Esta novela presenta un King que usa la nostalgia como núcleo argumental para describirnos ese Estados Unidos idealizado por series y películas que excluyen la segregación racial, la polarización política y las desigualdades sociales que son vistas desde la mirada de Jacob que ahora asume el rol de George Amberson, un testigo impotente ante la eventualidad del aleteo de mariposa. Vale la pena resaltar la calidad descriptiva lograda en cada página, logra ese efecto de trasladarnos por ese instante de lectura a la década de los cincuenta, incluso como conecta con otra de sus obras y lo hace de manera inesperada. Sin duda se hace evidente la extensa bibliografía consultada por King para recrear la década, además de las múltiples teorías de conspiración relacionadas a la muerte de Kennedy. Sin duda una maravillosa novela, muy americana eso sí, pero que aporta muchísimo desde las reglas del viaje en el tiempo, las consecuencias que produce en el protagonista y en su entorno. En definitiva, muy recomendada y que brinda una faceta particular del maestro del terror.

sábado, 25 de junio de 2022

RESEÑA DE NACIDO SALVAJE / Oscar Aibar y Fernando de Felipe



 

Ilustracion de Fernando de Felipe 1988

Siete individuos regresan de Vietnam, el corazón de las tinieblas, al que fueron enviados con la promesa de servir a su país, ungidos de horror y sufrimiento que trastornaron sus mentes. Testigos en primera fila de los horrores de una guerra provocada por el capricho y la soberbia de ser fieles a una idea impuesta por el miedo y la paranoia. Siete sobrevivientes que no volverán a ser los mismos de antes. Con esta idea en la mente del cineasta y guionista Oscar Aibar (Barcelona, 1967) y convertida en magistrales viñetas por el artista Fernando de Felipe (Zaragoza, 1965) surge Nacido Salvaje, una mirada a un conflicto bélico que marco a una generación y que ha sido llevado a la pantalla grande, las novelas y también los comics.

Ilustracion de Fernando de Felipe 1988

En este recopilatorio nos encontramos con siete relatos cortos (más un último de tres páginas de forma y estilo diferente al resto) en los que se nos cuentan las historias de siete ex militares que participaron en el conflicto bélico de Vietnam. En cada uno de ellos se explora como afecto esta experiencia en el frente de batalla en su vida, una vez están de vuelta en sus rutinas previas a la guerra, y en cómo ésta incidió en su percepción de la realidad.Para los autores estos relatos contienen, además de una profunda reflexión sobre la guerra, situaciones de una crudeza aderezada con referencias a la cultura pop de su momento que fungen como bálsamo para alivianar en parte ese horror que sube como un frio por la espina dorsal, directo a la yugular, lanzando el grano a los ojos; por lo tanto, puede no llegar a gustar a ciertos lectores y lectoras.

Ilustracion de Fernando de Felipe 1988

Aquí no hay pretensión moralizante, aunque tenga esa sensación de parecerlo en un principio. Mas bien tiene una intensión mas expositiva al exhibir el suceso y sus consecuencias, más allá de entrar a valorarlas. La realidad y la ficción se funden en un reflejo de lo que pudo suceder con estas siete vidas alteradas por el shock de las balas y la sangre.

Ilustracion de Fernando de Felipe 1988

En cada una de estas páginas se combinan muchos registros narrativos que juegan a favor del conjunto, entre ellos el uso de periódicos, o los canónicos flashbacks que recapitulan no solo el horror, sino todo lo demás. Al final de cada relato nos encontramos con fragmentos literarios extraídos de El túnel de Ernesto Sábato, El inmortal de J. L. Borges, El americano impasible, de Graham Greene, o El corazón de las tinieblas de Joseph Conrad, pero también de la canción The End de The doors, o incluso un fragmento de Los 100 consejos prácticos para el ama de casa, de Annette Winter. La referencia a la cultura de aquellos años es constante, así como a la que devino de aquel conflicto, haciendo de la misma referencia una marca de la propia obra, evidenciándolo en su propio título, que toma el nombre de la canción Born to be wild;del grupo Steppenwolf.

Ilustracion de Fernando de Felipe 1988

En lo que respecta al apartado gráfico Fernando se hace reconocible, como es una constante en su obra. Su estilo proyecta lo que se puede denominar como feísmo, con su deformación casi tétrica, esconde tras de sí una marca que le viene como anillo al dedo a estas historias. Cada trazo, cada viñeta que el lector recorre en cada página logra ser el reflejo idóneo del horror que fue aquel conflicto. Algo que hace de su estilo tan característico una necesidad para esta obra, es que en los momentos de calma, cuando no sucede nada en la acción, sino que sucede en el pensamiento, los rostros del autor cobran un doble sentido, porque se vislumbra en su imperfección una tensión latente, un estallido que está por suceder. Su uso lúgubre de las sombras, y el cambio puntual de un estilo más realista para volver a su conocido estilo caricaturesco, no hace más que enfatizar esa sensación de desasosiego que nos acompañará durante todo el camino.

Ilustracion de Fernando de Felipe 1988

En resumen, estamos ante un trabajo que no nos relata nada nuevo, quizás sí para alguien que no se haya empapado de historias de guerra, en concreto en guerras que suceden en terreno selvático; pero que en esencia su contenido no va a sorprender a nadie, y sin embargo quizás sea eso lo que más miedo dé de toda la obra. Que se nos narre cómo aquel corazón de las tinieblas de Conrad se hace presente en el mundo, y todos piensen; nada nuevo bajo el sol.

Edición original: Nacido salvaje (Toutain, Totem el Comix, serie entre mayo de 1988 y marzo de 1989)
Edición nacional/España: Nacido Salvaje (ECC, 30 de diciembre del 2021)
Guion: Oscar Aibar
Dibujo: Fernando de Felipe
Formato: Cartoné. 96 páginas. 20€ / 120.000 cop


lunes, 20 de junio de 2022

Editorial 123 / Fernando de Felipe, etnografo del futuro

 

En la década de los años noventa algunos autores del noveno arte orientaron su talento para abordar el futuro que se avecinaba con la llegada del Y2K. El futuro, en tanto construcción cultural, servia de lienzo para la imaginación desbordaba nutrida por la década del neón, el pop sintético y el ciberpunk, la rebelión contra el aterrador poder tecnológico. Uno de esos autores es Fernando de Felipe, un etnógrafo que no elude la mugre no descrita en esas visiones idealizadas del futuro, para integrarse en ella y hallar las respuestas a esas elucubraciones que circulaban en la mente de una juventud que atestiguo la caída del muro de Berlín, los vientos neoliberales y el impacto del videoclip.

F de Felipe es ante todo un artista-narrador exageradamente interesado en explorar, a través de los residuos de la cultura moderna,  ese mañana intervenido por la ingeniería genética, la guerra, los dispositivos tecnológicos y por supuesto el marketing publicitario; a través de crónicas repletas de viñetas y personajes bizarros, encontrando así una veta de explotación gráfica en la que puede llevar a cabo, con libertad creativa, esas fantasías escritas por Oscar Aibar y Jaime Vane - los primeros guionistas con los que trabaja - y luego de su propia invención.  

F de Felipe, para quienes no lo sepan, nace en Zaragoza en 1965, por aquel entonces España seguía en un régimen que tenía una estricta política sobre la producción y consumo de material cultural, privilegiando lo que se hiciera en España, y restringiendo el ingreso de material extranjero. Para el futuro etnógrafo del futuro F de Felipe el amor por las viñetas, como él mismo señala, viene de la inmensa fortuna de haber tenido un abuelo librero, Don Antonio Allúe, quien administraba una librería ubicada en la calle Estébanez, un segundo hogar que nutrió esa inquieta imaginación. Ante tanto material literario, grabados, postales antiguas, programas de cine y comics comprados a peso, termina por darle una suerte de noveno sentido como lector omnívoro, heterodoxo y sobre todo compulsivo que le ayudaría a la hora de cruzar su particular línea de dibujante.


Nombres como Frank Miller, Alan Moore, Bill Sienkiewicz, entre otros; comienzan a deleitar e influenciar a ese joven De Felipe quien se decantará por una línea grafica que se explaya en amplificar lo grotesco, lo raro y lo absurdo; entremezclado con acordes new wave, el neon y la experimentación gráfica con diversas técnicas. Celebramos la tarea de la Editorial ECC de reimprimir su obra bajo el sello “Colección Fernando de Felipe”, iniciativa que inicio en diciembre de 2021 y que seguirá hasta el 2023, publicando hasta el momento Nacido Salvaje (visiones de la guerra de Vietnam), A.D.N (crónicas de la ingenria genetica), S.O.U.L (una mirada a la segregación racial) y El Hombre que Rie (Adaptación del clásico escrito por Victor Hugo, que sirvió de inspiración para el personaje de Joker).

Sin mas preámbulos, conozcamos algo más sobre este autor y asi entender porque es tan importante para el comic de ciencia ficción y terror de los noventa.

viernes, 10 de junio de 2022

DOSSIER: FERNANDO DE FELIPE


Corría el año de 1996. En mi primer semestre de carrera de diseño grafico un amigo me obsequio unas viejas revistas Zona84 – magazine editado por Toutain en España – en las que aparecía mencionado Fernando de Felipe. Al llegar a casa, luego de dejar la maleta y hacer algo rápido para comer, me dispuse a echar una mirada a las revistas. Me encontré con una asombrosa adaptación de la obra El Hombre Que Ríe, escrita por Víctor Hugo (inspiración para la creación de The Joker en el comic de Batman), con un despliegue de color, trazo y personajes tan radicalmente diferentes a los dibujantes convencionales; desde ahí comenzó mi afición por este ilustrador.

Años después en una revistera de segunda mano me encontré un ejemplar de Museum, una antología de historias de terror al mejor estilo de cuentos de la cripta, pero lo particular es que era situada en El Museo del Coleccionista Compulsivo; eso sí a un precio tan irrisorio que era de no creer, por aquel entonces me costó 5.000 pesos colombianos, una ganga. Asi se fueron sumando mas hallazgos: nacido salvaje, marketing y utopía, Black Dekker y S.O.U.L. Cada página era una lección de las posibilidades del comic y el diseño, además los guionistas con los que ha trabajado tienen el toque para dar brillo a sus imágenes: Oscar Aibar, Jaime Vane.  

Con una notoria influencia de Bill Sienkiewicz, Frank Miller, Alan Moore y la línea chunga de los ochenta, Fernando de Felipe amalgama todo ese caudal pirotécnico en un estilo muy suyo, inigualable, en el que lo grotesco y lo estético hacen sinergia con una gama cromática que otorga la atmosfera correcta a cada relato.

Nacido en Zaragoza en 1965, estudio Bellas Artes en la Universidad de Barcelona, iniciando su trayectoria como historietista en los años 80, formando parte del "Equipo Bustrófedon”. ​ En un mercado en crisis, como era el español de mediados de esa década y principios de la siguiente, trabajó en las revistas de Toutain Editor, "Totem el Comix" (Nacido salvaje, 1988) y "Zona 84" (ADN, 1989), mayormente con guiones de Óscaraibar.​

Siendo ya profesor en su Facultad de Bellas Artes, Fernando de Felipe publicó Marketing & Utopía Made in USA ("Zona 84", 1990), continuando así lo que el crítico Jordi Costa ha denominado como su "ciclo mutante". Siguieron luego S.O.U.L. (1991), con guion de Jaime Vane, y ya definitivamente en solitario, El hombre que ríe y Museum, ambas de 1992. ​

En 1994, empezó a serializar en la revista "Viñetas" su última serie de cómic hasta la fecha: Black Deker, una mirada a ese héroe mercenario moldeado por el cine de acción ochentera a lo rambo, cuyo nombre viene de la famosa marca americana de electrodomésticos Black & Decker.

A finales del año 2021, la editorial ECC anuncio la publicación de la obra de Fernando de Felipe que comenzó con Nacido Salvaje y que ya lleva también ADN y SOUL. Esto es para mí una gran alegría por que por fin poder completar la colección y disfrutar de esas historias que marcaron mi adolescencia. Felicito esta clase de iniciativas y siempre es bueno que las nuevas generaciones conozcan a este tipo de autores que en su momento fueron trasgresores y dieron un nuevo aire al noveno arte.

Para conocer mas de sus obras pueden remitirse a este sitio: https://www.ecccomics.com/comics/biblioteca-fernando-de-felipe-4543.aspx

Editotial 138: Trascender lo humano para mejorarlo, Cyborgs y quimeras ciberneticas

¿Existe la posibilidad de que una persona pueda recuperarse luego de un incidente catastrófico? El escritor Martin Caidin se hizo esta pregu...