Hace unas cuantas semanas, en una
tarde apacible por cierto, minutos antes de una charla sobre Robert Bloch en
Mirabilia Libros, hablaba con mi amigo Mauro Vargas, editor de Léase a Plena
Noche – una publicación especializada en terror – sobre el trabajo de China
Miéville. Recuerdo que la conversación inicio precisamente por señalar que “con
ese nombre le hubiese sido difícil sobrevivir a los bullys en el colegio”, y no
es para menos, a primera vista es un nombre atípico en la oferta literaria
actual. En fin. Seguimos hablando y le conté sobre mi primer encuentro con este
autor. Le hable de Kraken (Factoría de
Ideas, 2013), una novela ambientada en un Londres moderno en el que
cultistas del Kraken, Londromantes, seres abisales y criaturas mágicas en
rebelión se dan cita para acompañarnos a seguir el viaje de autodescubrimiento
de Billy Harrow, un simple conservador de calamares, que se ve inmerso en una
contienda de las fuerzas que intentan acabar con el recuerdo de Londres. Hacia
mucho no me entusiasmaba tanto un autor de fantasía, debo agradecer de paso al
buen Rodrigo Bastidas, sus recomendaciones en verdad han sido muy acertadas.
¿qué se sabe de este escritor?
Bueno, Miévielle nace en 1972, en Norwich, Inglaterra. Luego se trasladaría a
Londres, futuro ambiente de la mayoria de sus relatos. China, su verdadero
nombre, es una reminiscencia del pasado hippie de sus padres. En fidelidad con
aquella época estos buscaron en el diccionario una “palabra hermosa”. China fue
su elección y la decisión se concreto cuando vieron que significa “amigo” en la
jerga popular. Lastimosamente aquella unión no duro mucho y la pareja se separa
cuando el pequeño China contaba solo con año y medio de edad.
Su actividad creativa inicio en
fanzines y prozines publicando comics inspirados en las obras del maestro de
Providence H.P. Lovecraft, leyendo Interzone
y escribiendo relatos de ciencia ficción y fantasía, Miéville admite su desinterés
por el terror moderno; en ese punto se ciñe a los clásicos. Entre sus referencias se destacan
Michael de Larrabeiti, Michael Moorcock, Kafka, Iain Banks, Jack Vance, Kim
Stanley Robinson, Steven Brust y Ken Macleod; de igual forma contrasta que
cierta parte de su obra se compare con el profeta de los acidos Philip K. Dick.
Su apariencia también es atípica
dentro del circuito literario: rapado, tatuado y con un pendiente muy
calamaresco; una táctica de escamoteo para ocultar a un hombre culto,
comprometido en el ámbito social y político, se dice que ha sido arrestado
varias veces por sus manifestaciones frente al parlamento británico. Incluso en
2001 fue candidato del Socialist Alliance Party al parlamento Británico. Esta
sera la primera de tres entregas que haremos sobre el Heraldo del New Weird,
hablaremos en principio de sus novelas Kraken, Un Lun Dun y La
ciudad y la ciudad. En la siguiente entrega hablaremos de la trilogía de
Bas-Lag: Estación de la Calle Perdido (2000), La cicatriz (2002) y El Consejo
de Hierro (2004). En la tercera entrega hablaremos de Los Últimos Días de Nueva
París (2016) y Embassytown (2012). Sin mas preámbulos bienvenidos a este
periplo a vuelo de moscardón por las calles del distrito Miéville.
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