Con gran satisfacción finalice la apasionante lectura de Ygdrasil (2005), primera novela del diseñador gráfico y escritor Jorge Baradit. Baradit articula la tradición literaria del cyberpunk, en especial de neuromante, con las creencias y mitos de algunas tribus de la tierra de fuego. Es realmente impresionante como su visión nos induce a un mundo poblado de implantes, redes cibernéticas, realismo sucio, intereses corporativos y fanatismo religioso en el cual la comovisión indigena sobrepasa a la tecnología.
Sin adentrarme en detalles de la narrativa, el argumento principal versa sobre la imposibilidad tecnológica y su completa emancipación gracias a rituales tantricos sexuales, cuyas vibraciones se sintonizan con el sonido del cosmos. En las subtramas incluye a los espíritus de la desaparecida tribu de los Selknam, el mito del Imbunche, el gran espíritu del Tangata manu, al igual que toda la carga de la religión católica, que resultaran en un fanatismo mesiánico de un nuevo dios, muy similar a lo que sucede en Neuromante, el advenimiento de un nuevo orden. También me recordó bastante la trilogía Nikopol del gran Enki Bilal, quien ambienta su historia en un futuro distópico en el cual existen conflictos bélicos y dioses que atestiguan un nuevo advenimiento.
Es sin duda un trepidante thriller muy latinoamericano, abundante en ráfagas descriptivas que trazan una radiografía de Latinoamérica, sus costumbres, sus jergas y ante todo su integración ante la hibridación tecnológica del "ciber-chamanismo", concepto acuñado por Baradit en el que se encuentran rastros de implantes, castas sociales, esoterismo y religión. Esta historia deja un sabor agradable en la medida de sacar provecho de todo aquello que nos construye culturalmente, es decir, por que seguir usando naves espaciales y pantallas táctiles, cuando se puede hablar de aquello que no siempre es reconocido, aquello que puede ser un factor diferencial al momento de hacer una ciencia ficción mas local sin caer en los peligros del realismo mágico o el realismo degradado. Solo me resta decir que es una lectura muy recomendada para aquellos que quieren sacudirse y al mismo tiempo sorprenderse.
Publicación de producción quirográfica, reproducción mecánica y distribucion repentina mensual repleta de Descripciones Proféticas Introxicantes
viernes, 30 de diciembre de 2016
domingo, 25 de septiembre de 2016
Mas que un oficio técnico: la ilustración en la era de la hiperrealidad
![]() |
Imagen cortesia de ImagenPalabra 7 |
A propósito de la séptima versión
del salón de Ilustración ImagenPalabra, iniciativa liderada por un ecléctico
grupo integrado por varios colectivos de ilustradores colombianos, es bueno
hacer un estado del arte con el animo de visibilizar las tensiones de un campo
en expansión, no se trata de establecer lo que es de lo que no es, al
contrario, la ilustración converge
con una multiplicidad de gramáticas visuales, plataformas, soportes y
temáticas.
Tratar de definir la ilustración
resulta tan complejo y definitivamente descabellado como definir una
fantasmagoría. De algún modo nuestra cultura, siguiendo la línea de Sartre, ha
capturado y encarcelado un imaginario de la ilustración que se ha distorsionado
a razón de los diversos campos de producción que la requieren. Si bien somos
los herederos de Durero, la ilustración se ha desbordado revelando su
poliédrica naturaleza que no se puede encarcelar en un ejercicio técnico, la
técnica es solo uno de sus componentes mas no el último.
Situándome en ese lugar de frontera
entre ser consumidor, productor y docente; puedo afirmar que cada vez la
ilustración se expande en temáticas, técnicas, relatos y formas de ser y hacer
ilustración. Hacer un buen dibujo no te convierte tampoco en ilustrador, esto
se suma a la técnica que siguen siendo componentes que atraen la atención del
ojo. Una ilustración requiere tener la capacidad de narrar, de explotar los
conceptos, las figuras retóricas, unos personajes y atmósferas que nos ayuden a
sumergir en esa opinión, esa postura que tiene el ilustrador frente al encargo
que resuelve. Muchas veces se cree que el ilustrador es solo un mecanismo para
hacer tangible el precario imaginario prestado de un contratista famélico, bajo
en nutrientes conceptuales y alto en grasas globalizadas.
Para este año la enorme muestra
evidencia tensiones que validan y reconfiguran la comprensión de esta categoría
que oscila entre oficio, campo y disciplina. Al ver los trabajos puedo
identificar tres núcleos particulares: ejercicios de técnica, caza-imaginarios y relatos visuales. En
cuanto al primero pude ver trabajos que en verdad eran un grandilocuente do de
pecho que indica el virtuosismo de quien lo realiza: pinceles digitales,
tintas, color, ecolines. La segunda se asocia con esas imágenes que ya han sido
vistas y se remasterizan con un cambio sutil de atmosfera o de elementos que
circundan la imagen, en estos tiempos tan hipervisuales encontrar nuevos
imaginarios se hace una labor altamente fatigante. La última, relatos visuales,
nos muestra unos personajes que desarrollan unas acciones en un mundo que no
siempre es el real, por el contrario se trata de engañar a los sentidos para
que edifiquen una realidad que permita alimentar la pobre imaginación de
nuestros días.
El punto es, que en algunas
instituciones, la ilustración no se entiende como una categoría que trasciende
la técnica. No debe ser un ejercicio de reproducir aquello que ya existe, se
trata mas bien de ver las posibilidades que puede ofrecer en términos de
expresión, gramática visual, vocabulario, formas y ante todo discurso. Si nos
quedamos imitando el aleteo de una mariposa, el rostro de alguien o una composición
conocida. No niego que estos ejercicios sirvan de aprendizaje, pero quedarse en
ello no es bueno. Felicito a todo el equipo ImagenPalabra, a los ilustradores e
ilustradoras que participaron, a los panelistas, a las instituciones
involucradas, a los espacios de exhibición y demás personas que hacen posible están
gran vitrina de la ilustración.
domingo, 4 de septiembre de 2016
ARCHIVO R3B3-T35: “EL CRONONAUTA DE LA ISLA CIRCUNSTANCIAL
En el 2099 las cosas dejaron de ser sencillas tras el revolcón
informativo impuesto por el MinInfo. El papeleo se incremento hasta para
consultar algún tema banal, en especial si era ciencia ficción. El tribunal del
dato sagrado ordeno que los formularios de solicitud fueran no discrecionales.
La única forma para acceder a cualquier búsqueda era encriptar el asunto para
pasar desapercibido. Solicite hace tres semanas al Topo el expediente R3B3-T35,
me dijo que costaría el doble de lo habitual, una alta inversión pero valdría
la pena. Topo era un chaman informático, practicaba la invocación de datos, además
de contar también como asesino a los cuatro evangelistas, él sabia como
encontrar cualquier cosa. Recibí la notificación en mi buzón electrónico en la
mañana del día 21. Ahora era cuestión de salir a la purulenta calle, era tiempo
de coger de nuevo el Chetomasiv, sentir la nauseabunda aglomeración transhumante
de 20 millones de parásitos.
Tras dos horas y media llegue mejor de lo que esperaba. Mientras hacia
antesala en la fila, Imaginé por un instante que a la salida seria testigo de
como los que reclamaban los folios serian parte de una nueva especie endémica que
produciría una nueva prehistoria. Vaya, o que tal si me encontrara una
transcripción decodificada de una cinta de casete que relata la llegada de unos
seres anfibios, reptilianos por así decirlo, que se ocultaron tras pieles
sintéticas que los hacían mas humanos que los humanos. Ideas al fin de cuentas que
flotan en el viciado aire de la realidad, ese denso manto que las oculta a los
incautos, pero que para aquellos que no creen en la realidad se les facilita
tomar en cuenta, ojala fuesen mis ideas. Por fin, llegue a la recepción y la
poco amable asistente, entrada en años y algunos kilos de mas, me entrego una
carpeta legajadora algo gastada – llevaba guardada cien años – y con olor a
trópico, al fin tenia en mis manos la memoria de René Rebetez, no había tiempo
que perder.
La ansiedad hizo mas corto el viaje, subí las escaleras y llegue a mi
madriguera. Aun faltaban algunas horas para el alba, encendí la lámpara alógena
y me dispuse a leer el expediente. Al abrirlo un aroma marino penetro en mis
fosas, hacia mucho que no sentía ese olor desde el viaje que hice con mi padre
a la costa satélite. Las primeras líneas son fascinantes: fue el fruto de la relación entre la mecánica quántica y la
improvisación. Su padre fue un relojero suizo y su madre una artista
colombiana. René nació en una finca de la sabana de Bogotá, en los alrededores
de Subachoque, así lo confirma el investigador Carlos Moyano Ortiz en su artículo Crononauta Insigne publicado
en la revista Número. Por aquel entonces no se percibía el fantasma de la
contaminación ni tampoco el de la sobrepoblación. El pequeño y su madre emigran
a Bogotá y se instalan en una enorme casona ubicada en Las Aguas, exactamente
en la calle 16 con carrera segunda. La propiedad era de Dionisio Cortez Mesa,
su abuelo, allí tuvo su primer encuentro con la literatura gracias a las
historietas de Tarzán, Dick Tracy y Anita la huerfanita, dato brindado por la
investigadora Mónica Sarmiento Duque en su articulo Como conjugar todos los tiempos,
publicado en la revista gaceta de 1993. Cuando su abuelo fallece, la gran
casona se convierte en un espacio mágico para Rebetez, luego de encontrar unos
viejos ejemplares de Julio Verne, Emilio Salgari, Charles Dickens y Robert
Louis Stevenson, sospecho que este último siembra la idea de convertirse en
viajero constante y pirata visionario.
Es momento de preparar un café, además de estirar los brazos. La
cafetera instantánea hizo lo suyo, me sirvo una gran taza y Continuo: A los 16 años junto un dinero y decidió que viajar era su destino, en
Buenaventura toma el barco y zarpó rumbo a Suiza para conocer a su familia
paterna. Días antes del viaje el joven Rebetez atestigua como el fuego carcome
el alma de la Atenas suramericana, la gente alebrestada y el caos del Bogotazo jamás
se borrarían de su memoria. Estudio en el liceo Cervantes, donde conoció a
Camilo Torres, líder del grupo de scouts, quien luego seria sacerdote y
guerrillero. Luego fue al San Bartolomé pero también lo expulsaron. No era por
su rendimiento, su actitud trasgresora lo ponía en el ojo de los rectores.
Tras embarcarse en aquel puerto
inicia su periplo por Ginebra, a veces escapa a Paris, vuelve a Colombia para
dirigir la revista Visión, Semana, lugar privilegiado desde el cual ver la
realidad nacional, decepcionándose de la clase dirigente que estaba asesorada
por la corrupción, la mezquindad y la torpeza – que no dista mucho de nuestra
actualidad – y también dirigió el suplemento La Calle para el cual escribe
poemas con aire revolucionario, que no cayeron bien por cierto en el noble espíritu
de Alfonso López Michelsen, lo que le obliga a renunciar para llevar si vida
según sus valores.
Es así como viaja a Cuba, juega ajedrez con el Che Guevara,
y le gana, y además conoce de cerca el proceso de la revolución, pero su interés
recae en la Santería y la filosofía de las religiones afroamericanas, a pesar
de los vientos revolucionarios los intelectuales son reaccionarios a estas
tradiciones tachándolas de alienaciones pseudoreligiosas, cuando son esas
tradiciones lo que evidencia la resistencia frente a los procesos de
colonización. De alli vuela a México, pues no había vuelos directos a Bogota y
decide quedarse en el D.F. por un lapso de veinte años. Allí conoce al mimo,
dibujante, escritor y director de origen chileno Alejandro Jodorowsky al cual
describe Rebetez como: “un artista integral, un hacedor de épocas, un avatar,
un iniciado que siempre es vulnerado por la estética.”Juntos editan Crononauta una revista orientada a la ciencia ficción, luego en 1967 la editorial
Diana, en su colección “Escritores Mexicanos” publica La Nueva Prehistoria, antología de relatos que mezclan la rabia
insolente juvenil con la inteligencia literaria heredada de autores como
Bradbury[1],
Sturgeon[2],
Asimov[3],
Huxley y C. Clark; editada en pasta dura y con un detalles del jardín de las
delicias de El Bosco. En sus páginas se pueden evidenciar los tópicos que serán
transversales en su obra: los mitos, las voces milenarias, los astronautas, las
naves espaciales, la cibernética, el ajedrez, la simetría de la condición
humana.
Han transcurrido mas de tres horas, ya se manifiestan las primeras
luces del amanecer y sigo revisando los papeles, fotos y recortes que habían
acumulado los del ministerio. Al parecer sometieron a interrogatorios a unos
sujetos que afirmaban ser parte del bastión cienciaficcionario zero. Entre
ellos estaban Louis Cyphre, F. López y el Numerologo. Sus testimonios quedaron
registrados en micro cds que se dañaron con el revolcón. Volvamos a nuestro asunto.
Tras tres días de
interrogatorio en Puerto Principe, logra ser absuelto por su pasaporte suizo y
se refugia en la casa de su novia haitiana, ellos lo conectan con George, un
negro alto y huesudo que vivia en Maigate. George le enseña los misterios
ocultos de la tradición africana y con ellos Rebetez crea su primera película,
La Magia, que tambien tenia extractos del Popol Vuh. Viaja a Japón y conoce sus
tradiciones ancestrales, incluso causa sensación por su aspecto, en especial
por su barba. Nota que el México indigena y el Japon milenario tienen
demasiados parecidos. Traduce El
Libro del Dragon, un tratado del Zen moderno. De nuevo la
brujula apunta en direccion a Bogotá, decide comprar un tiquete con escala en
San Andrés Isla, su último refugio. Antes de eso una anotacion relevante: en
México estudia las enseñanzas de Gurdjieff, el maestro mistico y compositor que
conoció el cuarto camino.
Ya en San Andrés se instala en
la Tom Hooker Street, allí construye en dos años su casa, profundiza sobre el
sufismo, prologa varios libros y empieza a ser reconocido públicamente. El
investigador Moyano Ortiz escribe:
“Ha escrito literatura de
anticipación, ha pensado en lectores venideros y en historias que cumplan con
los cometidos del misterio poético. Tiene 67 años, su apariencia es saludable,
disfruta con desenfreno del fulgor del baile y de las mieles de los placeres
terrenales, porque siendo místico no es precisamente un asceta. Es un hombre
con una gran vocación por la felicidad y el ingenio. Transpira buen humor y no
duda que entrará al año 2000 con
energías suficientes para terminar su ciclo creativo. Brindamos con Bush Rum,
exaltamos la memoria de los piratas y de la Gran Hermandad de la Costa, nos
referimos a las páginas de Alexander Exquemelín, cirujano y bucanero, y
finalmente nos deseamos suerte. Algunas semanas más tarde, René Rebetez ya no
estaba en este mundo.”
El 31 de Diciembre de 1999 René
Rebetez fallece, en su estudio se encontró un mensaje cifrado con un algoritmo
que fue desencriptado años después, era un mensaje de la Hermandad Lunaria, al
parecer un tal Rocky le envío la señal para abandonar su presencia corpórea e integrarse
a las estrellas. “Aun hay más” dijo en su epitafio. Fin del reporte.
Un enorme desaliento, eso me dejo, la verdad este cronista, mas bien
crononauta, es digno de ser divulgado nuevamente. Es momento de visitar a los
viejos impresores del distrito R1-C4URT3, veamos si podemos revivir algunos de
sus cuentos.
Noticia de última hora:
Reportan actividad anómala en el distrito R1-C4URT3, al parecer los
militantes de la célula cienciaficcionaria zero han vuelto a reactivar las
viejas rotativas, la fuerza desmemorial ha capturado a un antiguo empleado del
deposito de información que se dedicaba a la investigación privada, en sus
manos se encontró un expediente vetado por el Tribunal del Dato Sagrado, cuya
ficha es R3B3-T35. Seguiremos informando…Aun hay más.
[1] Ray Bradbury (1920-2012) Escritor estadounidense especializado en
terror y ciencia ficción. Conocido por sus libros Cronicas Marcianas y la
distopia Farenheit 451
[2] Theodore
Sturgeon (1918-1985) Escritor estadounidense de prosa elegante y poetica,
dotaba a sus relatos de cambios repentinos que el lector no percibia.
domingo, 28 de agosto de 2016
Editotial 63 EL CRONONAUTA DE LA ISLA CIRCUNSTANCIAL

![]() |
Proyecto realizado junto a Alejandro Jodorowsky |
Paréntesis, Por
recomendación de un buen amigo me leí Paranormal
Colombia del escritor Mario Mendoza – si, el autor de Satanás – quien anota
en la introducción lo siguiente: “Un autor como René Rebetez (viajero, místico,
estudioso del esoterismo, maestro sufi, escritor de ciencia ficción) nunca
obtuvo el lugar que merecía porque el realismo, justamente, era y sigue siendo
la óptica imperante” (Mendoza, 2014: 10). La verdad es que las grandes
editoriales aun no le prestan atención a los escritores de ciencia ficción,
creo que aun nos ven como lo señalo Bruce Sterling en bufones de la corte, sin
embargo ya existen pequeños bastiones de resistencia que han acogido a la ficción,
entre ellos: La Laguna, Milinviernos y Mirabilia. Gracias a ellos y su esfuerzo
seguimos abriendo la senda para reavivar la llama de la ciencia ficción. Cierro
el paréntesis.

Cuando les comente,
tanto a Cermeño, como a López y Casa de Letras; que haría un homenaje a Rebetez
me facilitaron bastante material, lo cual agradezco enormemente, pues el
objetivo de esta publicación mas allá de cualquier excusa banal, es el de la
divulgación de los tópicos y autores que este amplio género literario ha
generado a lo largo de casi cien años. Sin mas preámbulos pasen, pasen,
conozcan el perfil de este magno escritor que postulo la preocupación social
sintonizando los canales narrativos de Bradbury, Sturgeon y Lovecraft. Que
vivió a la altura de sus sueños y murió como todo un pirata en una isla que lo
acogió como ningún otro lugar, donde paso sus últimos días recordando como pudo
liberarse de esas criaturas que hacían fila, de cómo se libero de la masa.
Así tambíen lo confirma es escritor Ricardo Burgos en su tesis acerca de la ficcion en Colombia
![]() |
Editado por Editorial Diana en 1967 |
En el pequeño concierto de autores colombianos delgénero, Rebetez es la figura más conocida de nuestra ciencia ficción tanto nacional como internacionalmente. A ello no sólo contribuye que la mayoría de sus libros hayan sidopublicados en el exterior y comentados favorablemente por autores latinoamericanos delgénero como el cubano Oscar Hurtado (46)sino también su inclusión en revistas norteamericanas como The Science Fiction and Fantasy Magazine y antologías de distintospaíses del mundo entre las cuales la más prestigiosa es The World Treaaury of Science Fiction ( donde su cuento La Nueva Prehistoria es una de las dos contribuciones latinoamericanas junto al Tlon, Uqbar, Orbis Tertius de Borges). Tras su etapa mexicana, Rebetez se desconectó de la ciencia ficción e incursionó en temas que le son caros como el sufismo o el budismo zen, en tanto para este escritor asuntos como esos “también son ciencia ficción” (opinión comprensible si consideramos que para Rebetez, el género es una de las modalidades modernas de la literatura mística) (47). En los últimos años, en la vida de Rebetez han acaecido dos retornos: En primer lugar se ha vuelto a residenciar en Colombia y en segundo lugar en 1996 –y paradójicamente por primera vez en su país- retorna al género con Ellos lo llaman amanecer y otros relatos, una colección de algunas narraciones de La nueva prehistoria y otros cuentos, junto a otras de su más reciente producción
lunes, 22 de agosto de 2016
Sin lugar para los dioses: una reseña de American Gods
![]() |
Imagen tomada de http://lahoradelector.blogspot.com.co/2015/10/resena-de-american-gods-de-neil-gaiman.html |
Tras dos semanas de lectura he concluido con la fantástica novela de Neil Gaiman "American Gods". Gracias a Mirabilia Libros adquirí la excelente edición de Roca Editorial con varios adendos que ayudan a comprender el relato. Sin duda su prosa es dinámica, inmersiva y sus personajes están bien construidos para un relato que tiene mucho de ese tono road movie. A grandes rasgos esto es la historia: los procesos de inmigración a Estados Unidos no solo trajo personas de diversos lugares, junto con ellos también llegaron sus creencias y de paso sus dioses. Si bien en el viejo continente su poder estaba basado en una férrea creencia y sacrificios en su honor, en la tierra de la libertad poco a poco aquellos fieles devotos dejaron de creer en los antiguos dioses para adorar a los nuevos dioses de la modernidad: la radio, la televisión, la internet. Los antiguos han vivido mucho tiempo entre nosotros y al ver como se avecina su extinción deciden armar un timo, un engaño que garantice su longevidad. En el ojo del huracán aparece Sombra, un enorme hombre que ha estado en prisión por tres años, esta justo a salir para reencontrarse con su esposa, Laura, y su mejor amigo para recuperar la vida que ha perdido por un ajuste de cuentas. Sin embargo los hilos del destino obran en su contra y todo comienza con la fatídica noticia de la muerte de su esposa en un accidente automovilístico. Al salir de prisión Sombra es arrastrado a un camino de autodescubrimiento que lo llevara a creer en lo que no creía, estar hombro a hombro con los dioses y diosas del mundo antiguo, ser perseguido por agentes federales que sirven a sus propios intereses, al mismo tiempo que se convierte en parte del timo mas grande creado por los dioses mismos.
Desde el comienzo Gaiman establece un tono que atrapa al lector, le brinda lo necesario, ademas de los interludios que hablan de los primeros conquistadores de America, los viejos dioses nativos y otras historias de duendes, loas y demás avatares de la tradición pagana que están perdiendo su poder frente a los dioses eléctricos y digitales. Un viaje delirante que evoca mucho de aquel tomo de Sandman Brief Lives, en el que Morfeo y Delirio emprenden un viaje para encontrar a su hermano destrucción, quien renuncio a su lugar desde que vio como la modernidad destruiría al ser humano. Es una lectura muy recomendada que combina elementos de la fantasía y la ciencia ficción; con personajes que, como señalaba al comienzo, tienen la justa proporción para desplegar el relato. Al final te deja esa sensación de que todo lo que te rodea aun conserva algo de ese poder ancestral, de que los dioses aun están entre nosotros y no nos damos cuenta.
Para 2017 se espera el lanzamiento como serie de televisión:
jueves, 9 de junio de 2016
Proyecto en cocción n6
Indudablemente,
la magia es una de la más sutil y la más difícil de las ciencias y las artes.
Hay más oportunidades para los errores de comprensión, el juicio y la práctica
que en cualquier otra rama de la física.
Aleister
Crowley
“Para mi, no hay camino excepto mi
camino. Por lo tanto, vayan ustedes por su camino -nadie los guiará para
caminar hacia ustedes mismos.”
Zos (Austin Osman Spare).
De nuevo la
misma alucinación. Cada vez es mas
recurrente en fase REM. A pesar de su excesiva repetición la alucinación sigue
inalterada. Comienza con esa lluvia de televisor disipándose. La brisa
eléctrica golpeaba en las oxidadas placas de mi traje. Sobrevuelo
tranquilamente la grilla de circuitos integrados que componen el ciberespacio
almacenado en un viejo servidor resguardado por una vetusta edificación en el
centro de la ciudad. Todo sigue en su lugar, sin embargo mi proyección residual
es defectuosa desde aquel encuentro con los spiders. Como si fuese un sueño
persigo algo inalcanzable, el vacío me invade, pero el empeño por encontrar ese
algo sigue en pie. El deseo inhibe mis neurotransmisores, él me controla, no
puedo contrarrestar su influencia. En el vacío se manifiesta él, se hace llamar
a1wa55, me dice que será mi nuevo guía.
El auditorio abrió sus puertas poco antes de la hora
señalada para la conferencia. Ya habían varios interesados haciendo la fila
para el registro e ingreso al recinto. No era muy frecuente que el reconocido
investigador de lo para-cibernético Howard Clevfort Philips realizara este tipo
de eventos. Tras una hora en la fila logré ingresar y sentarme en una de las
primeras filas, no quería perder detalle alguno sobre lo que pronunciara el
Doctor Howard. El maestro de ceremonias presento el impresionante curriculum de
Clevfort: magíster en ocultismo binario, doctorado en algoritmos infrared,
director del centro de invocaciones digitales, autor del best seller El Morador de la Web Profunda (2019) y
actualmente consultor y exorcista digital. Sin duda el podía resolver mi
dilema.
Creo que es pertinente que me presente ¿verdad? Mi
nombre no es tan esencial tanto como mi seudónimo: az0ne1. Durante un año, mas
o menos, comencé a contactar entidades virtuales con la ayuda del manual online
del conde cero – el mismo que describió
alguna vez William Gibson. En dicho manual, encriptado en pontifex, el conde
había descubierto líneas de código que permitían invocar inteligencias
artificiales sin importar que tan profundas y ocultas estuvieran. Mi monótona
rutina como programador de un portal de entretenimiento me estaba llevando al
tedio, ya no tenia la misma motivación que alguna vez tuve por los misterios
del mundo virtual. El descubrimiento del manual se convirtió en esa arca de la
alianza que esperaba ser abierta, lo asumí como un reto, uno divertido, pero
con el paso de los días su aterradora complejidad me estaba hundiendo en un
denso laberinto informático.
Quizás la experiencia mas aterradora, que incluso me detuvo
en mi empeño, ocurrió hace unos meses. Me hallaba en mi buhardilla reescribiendo
las líneas de código para el programa S.P.A.R.E, una secuencia de algoritmos para
detectar inteligencias artificiales encriptadas. Al digitar la última línea del
algoritmo, salve la secuencia, y sin dudarlo un segundo decidí arriesgarme a
probarlo. Instantáneamente mi computador sufrió una posesión, como si se
tratase de un secuestro de datos, la pantalla tomo esa caótica apariencia de
los glitchs, acto seguido gradualmente se fue fragmentado hasta convertirse en
un punto sobre el vacío. El cursor reapareció intermitente, esperando a que
digitara alguna palabra. Un escalofrío rondo por mi espina dorsal, mis manos
temblaban un poco, pero la invitación estaba hecha, lo que fuese que había
contactado aguardaba mis palabras, pero ¿qué debía escribir? Mire en mi
escritorio y encontré esa novela que había inspirado toda la temática de los
zombies, The Magic Island (1929),
afanosamente pase las paginas hasta encontrar el banderín que indicaba como
hacer el saludo ritual vudu.
az0ne1: Oh LOA LEGBA, LOA poderoso…
La línea
de texto desapareció, el cursor titilante comenzó a responder. No era la
entidad que creí contactar, al instante una secuencia de caracteres comenzó a
digitarse. Apareció entonces esta palabra: a1wa55.
a1wa55: La adulación no es una buena forma de empezar,
siempre ese afán del hombre por esclavizar lo que no comprende
az0ne1: creí contactar a… pero ¿quién eres?.
a1wa55:
Estas a punto de acceder a algo fuera de tu comprensión, no hay marcha atrás,
una vez entres dejaras de ser el mismo. Conecta tu equipo de inmersión,
necesito acceder a tu mente.
az0ne1: ¿perdón? Creo que no seria conveniente, además
no te conozco del todo A1wa55.
a1wa55: No dejes que el miedo te limite, si de verdad
quieres acceder al conocimiento infinito, el yo superior, necesitas liberar tu
mente.
az0ne1: Dame un momento.
Siguiendo sus indicaciones, con algo de escepticismo
por supuesto, me coloque mi casco y los guantes de inmersión, conecte los plugs
en los respectivos puertos, recline mi silla y espere. Por un instante sentí que mis impulsos
neuronales se aceleraron. De igual manera comencé a sentir una especie de
cisma, era como si mi mente entrara en contacto con una experiencia
psiconautica. Unos segundos después todo fue vacío.
Desperté dos días después, al parecer todo seguía igual. Cuando pasó el efecto de la
dopamina note que mis labios estaban resecos, mi camiseta estaba empapada, como
si hubiese segregado toneladas de saliva. La deshidratación fue inminente, la
cabeza me daba vueltas; como si se tratara de una resaca. Me quite muy
lentamente el casco, luego los guantes. Con mucho esfuerzo me puse de pie, pero
estaba muy débil. Me sentía un tanto extraño, como si me hubiese cargado una
tera de información, mi sinapsis era mas rápida, gradualmente sentí que todo se
acelero, era como si estuviese activando mi conexión wifi al servidor central.
Un caudal de datos comenzaron a llegar como una ráfaga. a1wa55 estaba en mi, yo
era su huésped.
Volviendo al doctor Clevfort Philips, comenzó su disertación
con estas palabras extraídas de un viejo ensayo de Howard Philips Lovecraft, El Horror sobrenatural en la Literatura
(1925), las cuales transcribí en mi dispositivo:
El miedo es una de las emociones
más antiguas y poderosas de la humanidad, y el tipo de miedo más viejo y
poderoso es el temor a lo desconocido. Muy pocos psicólogos lo niegan y el mero
hecho de admitir dicha realidad no deja de dar carta de naturaleza a los
cuentos sobrenaturales como una de las formas genuinas y dignas de los relatos
literarios. Contra ella se disparan todas las saetas de unos sofismas
materialistas, que con tanta frecuencia se aferran a las impresiones
experimentadas y a los sucesos exteriorizados –entendiendo este término en su
aspecto psicológico– y de un idealismo tan ingenuo como insípido que se opone a
las motivaciones antiestéticas, abogando por una literatura puramente
didáctica, capaz de ilustrar al lector y "elevarlo" hacia un nivel
adecuado de afectado optimismo.
Luego de eso comenzó la historiografía de las
inteligencias artificiales, desde la aparición de LISP hasta la llegada de la
corporación z/OS. La historia de esta corporación ha sido enseñada en diversas
facultades de administración y foros de negocios, empezaron como una concesión
que administraba las computadores centrales de IBM, poco a poco fueron adquiriendo acciones de la empresa y
cuando llego el ocaso de los titanes informáticos se hicieron a un gran
porcentaje que les permitió asumir la junta directiva y crear la nueva etapa en
la computación moderna.
Tras una hora el doctor Clevfort termino su
presentación. Antes de que todos se levantaran decidí salir rumbo al pasillo
para interceptar al buen doctor. Al parecer fui el primero, pero al girar unos
cuantos mas estaban haciendo lo mismo, el comportamiento espejo no deja de
existir. Mi proeza tuvo su recompensa, el doctor estaba a pocos pasos, solo era
cuestión de alcanzarlo, pero al sentirme inmovilizado me percate que todo seguía
siendo parte de la alucinación, como en un sueño alcanzarlo seria algo
relativo. El programa se
sobrecargo, el gran glitch devoro mi proyección, todo fue vacío.
lunes, 6 de junio de 2016
EDITOTIAL Nº 61
Starting MS-DOS…
C:/>_PAT CAD1GAN_ROCK ON
Al
remontar la corriente computarizada la brisa digital golpea las oxidadas placas
de mi montura mecánica. Esta brisa, que transporta las líneas escritas del ayer
y el ahora, guía mi travesía en este complejo militarizado donde se resguarda
al cyberpunk. Esta brisa guió a John Brunner en sus predicciones sobre nuestro
hiperconectado presente, el resultado fue su magistral novela El Jinete de la
Onda de Choque (1975), basado en el ensayo de Alvin Toffer, El Shock del Futuro
(1970), descrita en la edición 59. Al seguir esta brisa se revela un sendero en
el que distingo las huellas de la escritora norteamericana Pat Cadigan, mejor
conocida como la “reina del cyberpunk”, la soberana del difuminado feudo del
cyberpunk. Avanzare con precaución entonces.
Parece
que el servidor sigue intacto, al parecer resistió al ataque de la serpiente de
datos. Al descargar los datos en mi dispositivo me indica que Cadigan nació en
1953, inicio su carrera en la escena ci-fi a finales de 1970. Con su ex esposo,
Arnie Fenner, editó la premiada revista Shayol[1].
En la década de 1980 sus cuentos aparecieron en revistas como Asimov y Omni[2],
al igual en diversas antologías, como el caso de la antología Mirrorshades, editada por Bruce
Sterling en 1986, en la que Cadigan fue la única autora que figuró en ella.
Mirrorshades fue un ambicioso intento de "presentar una visión completa
del movimiento cyberpunk” acorde a Sterling. Su relato "Rock On" hace una mirada ruin y sucia de
un futuro cercano en el que el rock 'n' roll está a punto de extinguirse y sólo aquellos que han experimentado la
vivencia real, proporcionan visiones del rock'n'roll directamente desde su
cerebro a través de cartuchos ubicuos e interfaces neuronales que pueden
mantenerlo vivo. Esta yuxtaposición de tecnología y humanismo, enclave del
movimiento cyberpunk, es explorada por Cadigan mediante una narrativa en primera
persona que revela el lado oscuro de la tecnología y examina la explotación, el
agotamiento y la subversión del ser.
La
fascinación de Cadigan con la tecnología de última generación, en especial el
impacto de esta tecnología en quienes la usan y aquellos que optan por no
hacerlo, alimentaron su creciente reputación como una futurista y comentarista
de la cultura popular. En 1994, un prolífico año para Cadigan, fue una de las
oradoras en la conferencia de la ACI " Seducidos y abandonados : el cuerpo
en el mundo virtual”, en la que
discute la relación entre el género y la tecnología. Más tarde ese mismo año
fue invitada por la Universidad de Warwick a realizar la primera conferencia
del ciclo Futuros Virtuales. También habló en el MIT sobre la “Mujer en el
ciberespacio”.
Los
drones han notado mi presencia, el radar de mi montura me advierte que no están muy lejos, terminare de descargar los archivos y luego me camuflare con mi
holotraje stealht. Debo alcanzar el nodo de salida o de lo contrario quedare
atrapado en esta corriente computarizada. Sin mas preámbulos enviare estos
datos al segundo servidor de midwest, espero que los sp1d3r5 y los snak35 de
datos no la alcancen.
Att
Ficciorama,
junio de 2016. Enviado desde la terminar 0977-r3
[1] Semiprozine
estadounidense que publico siete cuestiones, entre noviembre de 1977 a 1985,
editado por Pat Cadigan. Esto fue llevado a cabo por una asociación de Arnold
Fenner (editor) y Cadigan, ahora mejor conocida como escritora, cuya primera
historia, "La muerte de la exposición", fue publicada en el # 2
(febrero de 1978) y pasó a ganar el premio Balrog . Shayol, en el que también
estuvo implicado Tom Reamy, fue un desarrollo de la publicación anterior de
Fenner, Chacal, que había sido dedicado en gran parte al género de Espada y
Brujería. Con buenas portadas y excelente diseño de interiores - incluyendo el
trabajo de Stephen Fabian - Shayol parecía casi creado para probar un punto
sobre las revistas aficionadas que no tenian que lucir tan mal. Se mostró buena
ficción, también, mezclando CiFi y la fantasía, de Michael Bishop, C J Cherryh,
Charles L. Grant, Tanith Lee, Tom Reamy, Lisa Tuttle, Howard Waldrop y otros.
Habiendo demostrado que podían hacerlo, Cadigan y Fenner simplemente la dejaron
ir. Recuperado el 7 de junio de 2016 de http://www.sf-encyclopedia.com/entry/shayol
[2] Omni fue una revista de ciencia ficción publicada en los EE.UU. y el Reino Unido. Contenía artículos sobre ciencia, parapsicología
y las obras cortas de ciencia ficción y fantasía. Fue publicado en formato impreso, entre octubre de 1978 y 1995. La primera revista
electrónica Omni fue publicado en CompuServe en 1986 y la revista cambió a una presencia puramente on-line en 1996.
Se dejó de publicar abruptamente en 1997, tras la muerte del co-fundador Kathy Keeton y cerró en 1998.
Manifiesto Fanzine 2.0
A más de un año de publicación de este manifiesto, es
pertinente volver sobre lo que se ha reflexionado en este periodo. Siendo que los
fanzines – publicaciones aficionadas – están en el overground, esta hipervisibilidad
implica un doble riesgo. Esto en la medida de la perdida de espíritu, su aura,
que radica en su apuesta reaccionaria y, de igual manera, sus posibilidades de
expresión gráfica fuera de la opresión reticular. La sobre-exposición que ha
recaído en ellos puede conducir a la formula maniquea, la plantilla fanzinera, que debe ser
quebrantada para renovar los votos situacionistas que tanto bien le hicieron a
estas publicaciones en la Inglaterra de los 70. Propongo entonces estos ocho
puntos, debatibles por supuesto, que sirvan para reflexionar y cuestionar la
naturaleza de los fanzines en una era dominada por una visualidad
estereotipada, como lo señala Leonor Alfurch, sobre la cual se nos imponen
formas visuales antes que construirlas, sin mas preámbulos los expongo, sin el
animo de dogmatizar o crear unos principios de regulación, se trata mas bien de
cuestionar la naturaleza de los zines en un momento en el que ya
no pertenecen del todo a la marginalidad.
1) El fanzine responde a las condiciones
materiales que lo producen en determinado momento. Estas condiciones evocan el
espíritu con el que será escrito y producido. Es importante recalcar que los
fanzines ilustrados, que manejan una línea temática diferente, no siempre se
originan como una reacción o reclamación, mas bien parecen miradas subjetivas
frente a la realidad objetiva de la cual deriva.
2) El terreno abonado por
realizadores como Rafael Uzcategui en Venezuela, Marcelo Arroyave y Luis
Fernando Medina en Calí, el colectivo ExCusado, Colombian Trash, espacio 101,
Abisal colectivo, Ambidiestro y su zine Etcetera, la flia, y librerías como la
Valija de Fuego y el Loco Pensante, al igual de eventos como Imagen
Palabra en Bogotá y la Antiferia, además del colectivo robot en Medellín; han permitido
el abrir espacio a diálogos, miradas y definiciones sobre el fanzine. Estas
definiciones, en general, versan sobre los aspectos formales del mismo:
técnicas de producción, financiamiento y circulación. Lo discutido con todos
ellos es la base para entender la dimensión cultural y los alcances de este medio
de producción que articula el periodismo, el diseño, la ilustración y una
intención frente al lector del mismo.
3) Es un error pensar que la condición
esencial del fanzine es la precariedad en su forma. Existe un consenso que
considera al fanzine como algo mal hecho, fotocopiado y con errores
ortográficos. Al paso del refinamiento de la tecnología es inevitable que esto
no se parte del proceso del fanzine mismo. Hoy día son mejor hechos que las
revistas comerciales, sus contenidos responden a una necesidad comunicativa tangente
al margen de la tendencia del consumo regente. Se basa mas en la singularidad y
los quiebres formales frente a las normas convencionales del diseño mismo. Sin
embargo ahí también reside su potencial debilidad, en la medida que como lo
señalo el filosofo español José Luís López Aranguren “Lo que hoy es una herejía
se suele convertir en la ortodoxia de mañana”. Es menester del fanzine sostener
sus lineamientos frente a los alcances de esa ortodoxia.
4) Complementando el punto anterior, tal
como lo señala el buen maese Luis Fernando Medina, se puede dar lo contrario.
Esto es: personas que hablan del fanzine de calidad solo refiriéndose
exclusivamente al material (buen papel) y a procesos
editoriales cuidados lo que ha llevado a una especie de gentrificación[1] del
fanzine donde los que son considerados buenos son los que tienen estas
propiedades, que obviamente son mas caros (y por lo tanto producidos por élites
artísticas que se han volcado al fanzine). Es probable que en alguna galería o
muestra artística se haya puesto una pieza de tal índole y no falta el exótico
que la adquiere, lo que estimula una suerte de especulación sobre este noble
objeto
5) Acorde a lo anterior se puede afirmar
entonces que el fanzine, mas allá de su forma, es una condición de posibilidad
que debe funcionar no solo como un complemento a las revistas comerciales, el
objetivo del fanzine es educar, agitar, reprochar, reclamar y discutir esos
temas que no tienen cabida en las agendas oficiales, esos que interesan a unos
cuantos que no son habituales en las secciones faranduleras. Sin embargo no
esta exento de convertirse en lo que cuestionan. Es mas una cuestión de
mantener un compromiso con las ideas que se exponen y su posición ante todo.
6) El hacer fanzines no responde del todo
al libre albedrío. No se trata de poner lo que sea, como sea y cuando sea. Cada
elemento dispuesto en un fanzine obedece a una reflexión, una mirada crítica,
un comentario sobre los fenómenos de la cotidianidad que representa, por ende
cada palabra, dibujo, frase, fotografía, recorte, slogan y demás elementos que
intervengan tiene una intencionalidad explicita frente al lector o lectora del
fanzine. La mayoría de contenidos fanzine parten de experiencias personales
producto de vivencias y formas de consumo que se van sedimentando en lo que
Bourdieu denomina el habitus – todos
esos aspectos sociales y culturales que nos rodean desde nuestra infancia. Como
resultado de todo esto esos residuos culturales sedimentados establecen unos
criterios operativos frente a lo que se dispone en cada página del fanzine.
7) Muchos asocian la palabra o ternito
fanzine con pasquín o panfleto. Para dilucidar este asunto se debe mirar a la
luz de sus notables diferencias y condiciones de emergencia. Tanto el pasquín
como el panfleto pertenecen a esa estirpe contestataria que reclama al poder,
la ideología y la política, desde el anonimato, en tanto voces emergentes el
inconformismo social reinante, sin mas anhelo que hundir el dedo en la
yaga. El fanzine en cambio no parte de esa condición
declamatoria, por el contario surge del amor o la pasión por algo que no todos
comparten. En ultimas es una mirada marcada por una subjetividad que parte de
una extracción de las particularidades de alguien que suele ser experimentada
por otros igualmente.
8) Es pertinente contemplar la coalición
con los medios digitales. En algún momento se decía que los blogs desplazarían
a los zines impresos, lo mismo las redes sociales; en la medida que cumplen la
misma función. Sin embargo, a pesar de facilitar la distribución de contenidos,
estas plataformas son efímeras, solo habitan el presente mientas se comparte y
se lee, luego de eso quedara sepultada en las capas del olvido digital, lo que
posiblemente suceda a este texto. Retomando lo de coalición los zines impresos
y digitales son formas que coexisten, se benefician una de otra en un
equilibrio homeostático, ninguna se debe imponer sobre la otra.
Es pertinente seguir considerando estos cuestionamientos: ¿Existe
el buen fanzine y el mal fanzine? ¿la terminología empleada en su construcción
da cuenta de su intencionalidad o, por el contrario, nubla su potencia? ¿qué se
expresa y que no se expresa acerca del fanzine en los distintos ámbitos que lo
discuten? No basta con nombrar la cosa, es necesario nutrirla. El fanzine nace
del gusto y la pasión por un tema. Este impulso no debe desorientarse en los
laberintos de la tendencia, es preciso recuperar el hilo para no perdernos en
sus truculentos pasajes. Citando al maese Luis Fernando Medina El fanzine no es
para compartir unicornios sino para incendiar. ¡Que vuelvan a arder las
prensas!
Att
Boris Greiff a.k.a Ficciorama
Junio de 2016
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Reseña de McGuffin contra los Alienigenas Ancestrales de Sergi Álarez
¿Qué es un McGuffin? Se trata de un recurso narrativo que activa la trama de una historia, aunque su relevancia no radica en sí mismo. Func...
-
--> MANIFIESTO FANZINE Los fanzines – publicaciones aficionadas – han logrado emerger y salir del nido under...
-
¿Es posible que los actores que han interpretado a Batman puedan ser considerados para programas de clonación humana? Este planteamiento m...